En la cúspide de su carrera, Lamar Odom parecía un hombre que lo había conseguido todo: una carrera deportiva en uno de los equipos de baloncesto más destacados del mundo, fama internacional gracias a los buenos resultados en la cancha –dos anillos de la NBA– y un matrimonio con una de las bellas mujeres del mediático clan Kardashian.
Pero su historia cambió pronto, en una espiral de desgracia y decadencia.
Esta semana, el famoso exbaquetbolista de Los Ángeles Lakers, en proceso de separación de Khloé Kardashian, fue hallado inconsciente en el suelo de un cuarto de un burdel ubicado a 70 kilómetros de la ciudad de Las Vegas, en el oeste de Estados Unidos.
Y después de que el exdeportista fue trasladado al hospital Sunrise de Las Vegas –donde permanece en estado de coma y con pronóstico reservado– los medios recordaron que los fantasmas de la adicción a las drogas y el alcohol ya habían perseguido a Odom en el pasado.
Este jueves, sin embargo, salieron a la luz detalles reveladores sobre las posibles causas de su desvanecimiento.
"El ciudadano Odom habría tomado durante tres días continuos de 8 a 10 tabletas de suplementos para mejorar el rendimiento sexual", informó Sharon Wehrly, el aguacil del condado de Nye, donde está ubicado el burdel en el que fue hallado la exestrella de la NBA.
"En su cuerpo también se encontraron restos de cocaína, por lo que podríamos estar hablando de una sobredosis", agregó el funcionario.
Pero fueron las palabras "suplementos para el mejorar el rendimiento sexual" –presumiblemente algún "viagra herbal"– las que inmediatamente encendieron las alertas en los medios estadounidenses.
No es viagra
El pasado mes de marzo la Administración para los Alimentos y las Drogas de EE.UU. (FDA, por sus siglas en inglés) ya había emitido una advertencia sobre estos productos afirmando que "podrían contener drogas que necesitan de la aprobación médica y otros ingredientes que podrían ser perjudiciales para la salud".
Pero, ¿qué es el "viagra herbal" y por qué puede resultar peligrosos para la salud?
Habría que partir de un principio: los reportes médicos señalan que el único viagra que existe –o su denominación genérica, ya que la patente expiró en algunos lugares– es la famosa pastillita azul originalmente diseñada por la farmacéutica Pfizer.
"No existe un 'viagra herbal', no hay una pastilla alternativa o natural que la reemplace en sus efectos, por lo que hay que tener mucho cuidado con lo que se compra en el mercado", le dijo a BBC Mundo Louise Draper, directora del centro médico Health Bridge en Londres.
Pero una de las confusiones habituales surge porque algunos de estos productos "naturales" también contienen sildenafilo, el ingrediente activo del viagra.
De hecho, la FDA ha prohibido varias marcas que pretenden comercializar sin autorización médica productos que contienen sildenafilo, que en teoría no puede ser adquirido sin una prescripción de un especialista.
"El número de estos problemáticos productos disponibles en internet aparentemente se está incrementando", advirtió el director de la división de drogas de la FDA, Michael Levy.
Y, según Levy, el principal riesgo es la mezcla de este producto con otros ingredientes que podrían acrecentar los peligros de su consumo.
"Muchas personas perciben estos productos como seguros porque son vendidos con una marca donde sugieren que son alternativas totalmente naturales a las drogas prescritas que sí están aprobadas por la FDA para la disfunción eréctil", explicó el funcionario.
Mezcla mortal
Aunque en el cuarto del burdel Love Ranch, donde fue hallado Odom, no se halló ninguna droga, el diagnóstico de los médicos que lo atienden en el Sunrise Hospital de Las Vegas fue sobredosis por consumo de drogas.
"Pero el asunto en este caso es cuando mezclas estos suplementos sexuales con una droga como la cocaína le estás poniendo al corazón dos sustancias que lo afectan directamente al mismo tiempo", explicó Draper.
Y añadió: "Es que ese es uno de los principales problemas con este tipo de suplementos, que no se sabe con exactitud, al no estar regulados, de qué están hechos y cómo pueden afectar al cuerpo".
Y surge una cuestión: ¿por qué alguien como Odom necesitó de este tipo de pastillas casi clandestinas para una supuesta maratón sexual?
“La popularidad de este tipo de productos se debe a que pueden evitar la vergüenza de admitir ante un médico un problema de disfunción eréctil y los usuarios los compran directamente de internet", explicó.
"Por eso la principal recomendación es siempre buscar el consejo de un médico antes de consumir cualquier medicina. La automedicación es un asunto muy riesgoso para salud", agregó la especialista.